Perú: toque de queda en Amazonas
- Redacción
- BBC Mundo

Los disturbios comenzaron el viernes.
El ejército en Perú estableció puntos de control e impuso un toque de queda en las provincias de Bagua y Utcubamba, en el estado Amazonas, en el norte del país, luego de una ola de violencia que ha dejado más de 40 muertos.
Con el correr de las horas se elevó a 47 el total de víctimas fatales producto de diferentes choques entre policías e indígenas que protestaban contra una serie de decretos legislativos que consideran "lesivos" para sus comunidades.
Al menos 22 policías y nueve manifestantes murieron durante los disturbios, informaron las autoridades.
Sin embargo, los manifestantes sostienen que 30 indígenas perdieron la vida.
Los problemas comenzaron el viernes cerca de Bagua cuando los indígenas iniciaron sus protestas para oponerse a planes que autorizan la perforación en busca de petróleo y gas en tierra ancestral.
Los manifestantes tomaron como rehenes a 38 policías, al menos nueve de ellos murieron al tiempo que el ejército avanzaba para liberarlos.
Se trata de la peor ola de violencia en Perú desde el fin de la insurgencia del grupo Sendero Luminoso en la década de 1990 y el desafío más grande que debe enfrentar el presidente Alan García desde que asumió el poder en 2006, informó el editor para América Latina de la BBC, Emilio San Pedro.
Arrestos
El toque de queda, medida que se inicia a las 15:00 horas hasta las 06:00 horas del día siguiente (20:00-11:00 GMT), tiene efecto inmediato, anunciaron las autoridades quienes revelaron que hay 72 personas arrestadas.
En un comunicado, el presidente García dijo que Perú estaba sufriendo "una agresión subversiva contra la democracia" y juró responder "con serenidad y firmeza".
El mandatario indicó que como consecuencia de la "agresión irresponsable" de los manifestantes, "22 policías han sido asesinados en condiciones de salvajismo y barbarie y con métodos idénticos a los empleados por Sendero Luminoso, se procedió a degollar y herir con lanzas a humildes policías rendidos y sin armas".
Sin embargo, los líderes de las protestas juran que continuarán las manifestaciones.
Al tiempo que el ejército se desplegaba en el área, miles de indígenas con lanzas de madera aseguraron que continuarían bloqueando las carreteras si las fuerzas gubernamentales no ponían fin a los esfuerzos para dispersar a los manifestantes.
"Estamos luchando porque tememos que nos arrebaten nuestra tierra", le dijo Denis Tangoa, una manifestante ubicada en uno de los cortes de ruta, a la agencia de noticias Reuters.
El bloqueo que ha interrumpido el transporte de combustible ha afectado a la región amazónica por al menos dos meses.
Las tribus indígenas quieren obligar al Congreso a que revoque las nuevas leyes que promueven la minería extranjera en el bosque tropical.
"No nos vamos a rendir hasta que den marcha atrás a esas leyes dañinas para nosotros", señaló a Reuters Luis Huansi, un líder indígena. Según los críticos, García cometió un gran error cuando no tomó en cuenta la oposición de los grupos indígenas a la explotación de lo que ellos consideran es su territorio ancestral, afirmó el corresponsal de la BBC en Perú, Dan Collyns.
Toda esperanza de diálogo ahora parece una posibilidad distante, concluyó nuestro corresponsal.