¿Por qué el Man United se fijó en Valencia?
- Raúl Fain Binda
- BBC Mundo

La elección de Valencia por Ferguson podría interpretarse como una "consagración", dice Fain Binda.
El internacional ecuatoriano Luis Antonio Valencia, cuyo pase al Manchester United acaba de ser confirmado, puede convertirse en una de las sensaciones de la Premier League la temporada próxima.
Una de las razones para el optimismo es la confianza que merece el juicio de Alex Ferguson, a quien muchos creen el mejor entrenador del planeta.
Dejando de lado los errores ocasionales -Juan Sebastián Verón, por ejemplo-, Ferguson tiene en el haber de su cuenta nombres tan rutilantes como Eric Cantona y Cristiano Ronaldo, que llegaron al club cuando muy pocos creían en ellos y se convirtieron en grandes figuras internacionales.
"He disfrutado mucho de mi estancia en Wigan, pero estoy excitado ante la oportunidad de aspirar a los máximos honores en el fútbol de este país", dijo Valencia.
"Jugar ante 76.000 aficionados en Old Trafford, junto a Wayne Rooney, Rio Ferdinand y Ryan Giggs será una experiencia inolvidable. Espero que los hinchas del Wigan me comprendan", agregó.
Aristocracia
El mercado futbolístico actual tiene varios estamentos en su parte superior, claramente definidos.
En la cúspide sólo hay tres "superclase", Cristiano Ronaldo, Kaká y Messi.
El portugués y el brasileño acaban de ser adquiridos por el Real Madrid, ya sabemos, por cifras que muchos encuentran ridículas, pero que el presidente del club cree que producirá ingresos mucho más elevados.
Messi está fuera del mercado, por su deuda de gratitud con el Barcelona.
En segunda fila están los grandes jugadores, del tipo de Villa, Ibrahimovic, Eto'o, Iniesta, Ribéry y algún otro, con precios muy inflados debido a la distorsión que significaron las operaciones por Kaká y CR7.
La contratación de estos futbolistas es muy difícil, porque pocos clubes se pueden permitir la "plusvalía" en el mercado.
Y en tercer lugar, a precios más o menos asequibles, figuran los buenos jugadores que prometen algo más, tal vez mucho más. Entre estos está Antonio Valencia, de 23 años.
Realismo
Ferguson crea una poderosa ala derecha con Valencia, pero aún le falta el mecanismo.
Valencia no es "el nuevo Cristiano Ronaldo", porque nadie está a esa altura. Y tampoco puede reemplazarlo en varias de sus funciones.
El portugués es el futbolista en actividad más completo y versátil.
Messi lo aventaja en talento natural, dicen los entendidos, pero CR7 tiene a su favor estatura, tiro de larga distancia y con balón detenido, remate de cabeza y una potencia fenomenal.
De modo que Alex Ferguson no contrató a Valencia para reemplazar a Cristiano Ronaldo, sino para cumplir una de sus funciones. Sólo una.
Los comentaristas ingleses destacan que, aparte de su ubicación en el ala, Valencia comparte con CR7 la facilidad para el regate -o gambeta-, pero también tiene otros puntos fuertes.
Steve Bruce, el ex DT del Wigan, donde el ecuatoriano se dio a conocer en Inglaterra (ahora el técnico es el español Roberto Martínez), dijo que "tiene velocidad, le sobra habilidad, es fuerte como un toro y además no baja nunca los brazos".
En esta descripción no figura la capacidad goleadora, y esta es la principal diferencia con el jugador al que reemplaza en los papeles.
Adelantando movidas
En el Wigan, Valencia se cansó de dejar adversarios por el camino y de lanzar centros bien medidos, pero sólo marcó tres goles la temporada pasada. Su cosecha es de siete goles en 83 partidos en la Premier League.
Es posible que, tras perder a CR7 y a Carlos Tévez, y esperando todavía a que Dimitar Berbatov rinda de acuerdo a las expectativas, Ferguson decida colocar a Wayne Rooney en una posición central.
O tal vez cuaje alguna de las contrataciones en el segundo estamento de jugadores, mencionado más arriba.
En el caso del club inglés los rumores traen los nombres del argentino Sergio Kun Agüero y del francés Karim Benzema, del Lyon (aunque ahora el Real Madrid asegura haber contratado al delantero del Lyon).
Sea como fuere, es evidente que la primera precaución que tomó el entrenador fue la contratación de un wing de desborde, capaz de lanzar los centros que necesitarán los rematadores centrales.
El futuro mecanismo del Man U todavía no se vislumbra con claridad.
Ferguson ya ha armado su ala derecha con un ecuatoriano. Todavía le falta bastante para completar el mecanismo.