Brown rechaza críticas
- Redacción
- BBC Mundo
El primer ministro británico Gordon Brown rechazó críticas a las políticas de su país y EE.UU. al pronunciarse este miércoles a favor de una combinación de estímulos financieros y regulaciones bancarias para reactivar la economía mundial.
Brown le restó importancia a discrepancias entre la UE y EE.UU.
El mandatario habló en anticipación de la cumbre del G-20 que se celebrará en Londres la semana próxima y que incluirá a líderes de países industrializados y naciones emergentes que representan a más del 80% de la economía mundial.
"Creo que el mensaje que va a salir del G-20 es que vamos a hacer lo que haga falta para restaurar el crecimiento en las economías del mundo y al mismo tiempo mantendremos vigentes nuestras opciones hacia políticas fiscales sostenibles en todos nuestros países", señaló Brown en una conferencia auspiciada en Nueva York por el diario The Wall Street Journal .
Brown salió al paso de comentarios del gobernador del Banco de Inglaterra, Mervyn King, para exigir cautela en los programas de estímulo económico debido al elevado endeudamiento en la economía británica.
El gobernante también minimizó las diferencias de la Unión Europea con Washington y Londres.
Críticas de Topolanek
El primer ministro saliente de la República Checa y actual presidente de turno de la UE, Mirek Topolanek, señaló a parlamentarios europeos en Estrasburgo que "EE.UU. no va por buen camino" con sus costosos planes de reactivación económica.
Topolanek criticó los planes de reactivación económica de EE.UU.
"Todas esas medidas, su combinación y su permanencia, constituyen el camino hacia el infierno. Hace falta que leamos los libros de historia", dijo Topolanek.
"Brown le restó importancia a informes de una desavenencia entre ambos (la UE y EE.UU.) al señalar que veía un consenso en lugar de un desacuerdo", señaló la corresponsal de la BBC en Nueva York, Laura Trevelyan.
El dirigente laborista parece tener poco margen de maniobra tras su intervención para paliar la crisis financiera.
"Londres y Washington quieren incrementar el gasto en respuesta a la crisis financiera, mientras la mayoría de los líderes europeos se inclinan a favor de una regulación más estricta del sistema financiero", agregó Trevelyan.
Los mercados financieros pusieron en tela de juicio las aseveraciones de Brown tras el fracaso de una subasta de bonos del gobierno británico.
Pocos compradores
El Tesoro británico intentó vender este miércoles US$2.540 millones en bonos de 40 años, pero sólo encontró compradores para US$2.360 millones. Fue la primera vez desde 2002 en que no hubo suficientes postores para una colocación de deuda.
Algunos analistas señalaron que ese hecho refleja dudas sobre las finanzas del país, pero el Tesoro británico dijo que sería "incorrecto sacar cualquier conclusión de esto".
Durante la sesión de preguntas y respuestas Brown dijo que esperaba que los países del G20 logren acuerdos para ayudar a las economías de Europa central y oriental y una "continuación del enfoque coordinado para la política fiscal y monetaria, además de acuerdos internacionales sobre la supervisión del sistema financiero".
Brown hizo hincapié en que hace falta un mecanismo para llamar la atención sobre casos de países que impongan medidas proteccionistas que calificó como "el mayor peligro que enfrentamos".
"Espero que en la cumbre del G-20 no solamente acordemos mecanismos para lograr un acuerdo sobre el comercio mundial sino que facilitemos la expansión del comercio en un mundo en que el intercambio comercial empieza a retroceder", agregó.