Las voces que aguardan al G20
- Ignacio de los Reyes
- BBC Mundo

Panfletos de los grupos anti-globalización contra el G20.
Los líderes mundiales quieren rescatar al sistema financiero de su crisis. Pero las organizaciones no gubernamentales (ONG) tienen una agenda diferente.
Mientras el G20 se cita en Londres, y durante los días previos a la reunión, cientos de grupos se manifiestan en las calles para pedir soluciones a sus gobernantes.
Lea algunas de sus reivindicaciones:
Ayuda a los más pobres
El 28 de marzo, cinco días antes de que Gordon Brown recibiera a sus invitados, más de un centenar de sindicatos, ONG, y organizaciones medioambientales recorrieron el centro de Londres bajo el lema 'Put People First' (Pongan primero a las personas).
"Es necesario un cambio radical" del modelo económico, explica Claire Melamed, coordinadora de la organización caritativa Action Aid que participará en la manifestación.
"Esperamos inspirar al G20 para que sean valientes y acometan este cambio", dice.
Aunque son escépticos, estos grupos pretenden arrancar al G20 un compromiso para crear empleos, ayudar a los desfavorecidos del planeta y proteger a aquellos que más van a sufrir la crisis, especialmente los países en desarrollo y las mujeres.
Y, sobre todo, piden cambios urgentes de la estructura financiera global.
"Los países en desarrollo y emergentes como los de América Latina no han contribuido a crear esta crisis, y sin embargo, sus pueblos la están pagando como el resto del mundo", lamenta la coordinadora de Action Aid. "Nuestro objetivo final es simplemente hacer un mundo más justo".
Lucha contra el cambio climático
El cambio de modelo económico que reclaman los manifestantes no sólo debe conducir a un sistema más justo con los más pobres. Además, recuerdan que tiene que respetar el medio ambiente y reactivar la lucha contra el cambio climático.
Miles de personas esperarán acampadas en tiendas y sacos de dormir la llegada a Londres de los jefes de Estado y de Gobierno en la mañana del 1 de abril.
Con su 'campamento verde' quieren acabar con el mercado de emisiones de CO2.
"La respuesta a la crisis ha sido ayudar a las industrias contaminantes", dice Joanna Cabello, de Climate Camp.
"Los que están ganando dinero son los que deberían estar pagando. Nosotros pedimos dejar el carbono en la tierra, justicia social y respeto a las comunidades indígenas", añade.
Fin de las guerras
El tercer pilar en la agenda de los manifestantes será la paz. La coalición Stop the War (Paren la guerra), que agrupa a organizaciones pacifistas y musulmanas, quiere aprovechar la visita de Barack Obama para reclamarle el fin de las guerras de Irak y Afganistán, frenar la carrera armamentística y cooperar con el pueblo palestino.
'Menos bombas y más empleos', piden en su manifiesto.
A su vez, otras 60 organizaciones socialistas, anarquistas y ecologistas se concentrarán el 1 de abril en contra de la guerra, el cambio climático, los crímenes financieros y el blindaje de las fronteras, a lo largo y ancho de Londres.
Participación
Se espera que ésta sea una de las protestas más multitudinarias desde las manifestaciones en contra de la Guerra de Irak, en 2003.
Las diferentes agrupaciones que plantarán cara al G20 se han movilizado especialmente a través de Internet, sobre todo en blogs y redes sociales, con la intención de involucrar al mayor número posible de gente.
En Twitter, grupos como 'Put the People First', 'Meltdown in the City' o 'Climate Camp' informan a activistas de todo el mundo de los últimos preparativos.
Y en el sitio Facebook se cuentan por miles las personas que tienen pensado asistir a alguno de los actos de protesta convocados. Como Ferrán, un español residente en Londres que participará como voluntario de una organización contra la pobreza en la marcha del sábado.
"Queremos hacernos ver, que tengan en cuenta otros puntos de vista y cambien el modelo. No basta con poner parches y seguir como siempre", explicó a BBC Mundo.
Alerta policial
La policía carga contra manifestantes en una marcha contra el G20 en Ottawa, en 2001.
La manifestación del 28 de marzo fue completamente pacífica, y los participantes sostienen que así serán todas las protestas.
Algunos convocantes han colaborado directamente con la Policía Metropolitana de Londres en la coordinación de sus reclamos, aunque la policía británica ha desplegado un fuerte dispositivo de seguridad ante la posible aparición de grupos violentos.
Miles de policías patrullan las calles de Londres durante estos días, en una operación que costará más de 7 millones de libras al país anfitrión.
Los propios grupos han respondido a la alerta policial. Los organizadores del 'G20 Meltdown', que aboga por "una nueva revolución inglesa", advierten: "Venimos en son de paz, pero si vienen por nosotros, nos defenderemos. A nosotros y a nuestros hijos".