EE.UU. y Venezuela pasan la página
- Yolanda Valery
- BBC Mundo, Venezuela

Los dos países habían retirado a sus embajadores en septiembre.
Es oficial. Los embajadores de Estados Unidos y Venezuela en sus respectivas capitales regresarán a sus puestos en breve, de acuerdo con sendos comunicados oficiales de Caracas y Washington.
Así, Venezuela levantó la declaratoria de "persona non grata" que le otorgó al representante diplomático estadounidense, Patrick Duddy, en septiembre pasado.
Aquél fue un gesto de apoyo a Bolivia, que por entonces atravesaba por hechos de violencia que el presidente Evo Morales atribuía a una campaña de desestabilización organizada por Washington, pero también la culminación de meses, sino años, de tensas relaciones entre los presidentes Hugo Chávez y George W. Bush.
"De acuerdo al principio de solidaridad, las autoridades competentes de EE.UU. han dejado sin efecto las medidas similares que pesaban sobre el embajador de Venezuela en Washington (Bernardo Álvarez)", indicó el comunicado del departamento de Estado.
Las dos notas señalan que los diplomáticos podrán volver a sus cargos inmediatamente. En el caso del Álvarez, la reincorporación se producirá tan pronto como este viernes, dijo la cancillería de este país.
De esta manera los dos países pasan la página de uno de los períodos más difíciles en la historia reciente de las relaciones binacionales, caracterizado por acusaciones de intervencionismo por parte de Venezuela, y críticas a la situación política y de derechos humanos desde EE.UU.
Otro estilo, mismo contenido
Pero eso no significa que el capítulo que empieza esté pintado de color rosa, según le dijeron a BBC Mundo analistas internacionales.
"Es el principio de la normalización, pero obviamente hay importantes temas en la agenda bilateral", señaló la profesora de política y relaciones internacionales del Miami Dade College, Vilma Petrash, en EE.UU.
"Más allá de la retórica diplomática, lo que está pasando en Venezuela en materia democrática, de recentralización, de atentados contra los espacios ganados por la oposición, así como la cuestión de la propiedad privada, va a salir la luz pública", indicó la venezolana Petrash.
Según la internacionalista, "una vez acercados los embajadores, habrá más oportunidad de abordar estos temas directamente". Indicó que EE.UU. probablemente lo hará bajo un esquema de respeto mutuo y mayor igualdad, y que operará en forma más "discreta y prudente" que la administración del ex presidente George W. Bush.
Sin embargo, señaló, eso "no quiere decir que EE.UU. renuncie a sus principios en materia de derechos humanos y democracia".
Prueba de ello sería el apoyo que el presidente Obama le ha dado a los gobiernos de México, Brasil y Chile. En el caso de los dos últimos, "está diciendo que está de acuerdo en que en América Latina se ha producido un viraje importante a la izquierda, pero que lo va a respetar en el marco de la democracia", afirmó.
Sin esperanza de cambio
Por su parte, desde la acera oficialista, el internacionalista Raimundo Kabchi le dijo a BBC Mundo que el gobierno venezolano no abrigaba "esperanza de que haya cambio en la política norteamericana", pero coincidió en que el restablecimiento de las relaciones diplomáticas abría "una nueva página".
"Los intereses de EE.UU. son los mismos. Lo que sí cambiaría es la visión, los métodos, los mecanismos que usa un gobierno frente a un determinado caso. No creo que el presidente Obama tenga una política intervencionista como tuvo el presidente Bush", afirmó.
Interrogado sobre el hecho de que portavoces estadounidenses ya han ratificado algunas de las críticas que antes le hiciera Bush al gobierno venezolano, Kabchi señaló que es "algo sano" que EE.UU. no esté de acuerdo con todo lo que se hace en Venezuela.
"Nosotros tampoco estamos de acuerdo con todo lo que hace EE.UU., pero de ahí a conspirar, financiar y ayudar a la oposición en planes de magnicidio, es totalmente diferente", dijo.
"Ojalá que el presidente Obama haya entendido un poco mejor los vientos de cambio que soplan en nuestra América", agregó.